Tarde lo Conocí
En vivo
La OEA urgió este viernes a sus países miembros a apoyar "según sus capacidades" la misión de apoyo a la seguridad en Haití, durante una Asamblea General en Antigua y Barbuda.
El país más pobre de América Latina y el Caribe está sumido en una crisis política y en una ola de violencia de grupos armados a la que intenta poner fin una misión internacional de apoyo a la seguridad liderada por Kenia.
La estabilización de Haití es esencial para los países de la región por sus efectos indirectos. La inseguridad y la crisis económica son un caldo de cultivo para el tráfico de droga, el lavado de dinero y la emigración ilegal.
Previas arduas negociaciones, los países de la Organización de los Estados Americanos (OEA) adoptaron por consenso un proyecto de resolución impulsado por Haití y Estados Unidos.
El texto urge "a los Estados miembros a que presten apoyo, según sus capacidades, a la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) en Haití, incluso a través del Fondo Fiduciario de las Naciones Unidas, y a que se comprometan a reforzar la capacidad operativa e institucional de las fuerzas nacionales de seguridad haitianas".
Propone que hagan "contribuciones materiales y en especie, a través de mecanismos existentes".
El documento pide a los Estados miembros "que incrementen con urgencia sus esfuerzos para la aplicación de soluciones concretas y efectivas a la grave crisis" en Haití.
El canciller haitiano, Jean-Victor Harvel Jean-Baptiste, calificó la adopción del texto de "paso esencial" en la buena dirección y llamó a la OEA a "pasar a la acción sin tardar".
La falta de soluciones a la situación en Haití, pero también en Venezuela, exaspera a Estados Unidos.
El vicesecretario de Estado estadounidense, Christopher Landau, cuestionó el jueves la existencia misma de la OEA si es incapaz de resolver estas crisis.